Neargash y Sayasin han realizado su trabajo satisfactoriamente. Los ejércitos de los hombres han quedado encerrados en el mundo de los gull’s, donde descubrirán que la especie degenerada está completamente destruida, y nuestra alianza, una farsa.
-Geltmugrer: ha llegado tu hora.
El cometido de los Shilfo es atacar Rasel desde las Tierras Negras, para atraer cualquier defensa que pueda quedar en el mundo de los hombres, y así, poder conquistar el Reino de Frangul sin oposición alguna.
La poderosa hermandad se prepara para partir inmediatamente.
-No fallaremos. -me asegura.
Por otro lado, Serapius también se prepara. Los Xelth embarcarán en Nabuk, para alcanzar la costa de la península y abordar las cindo ciudades por sorpresa. Dominaremos el reino más importante de los hombres, y pronto continuaremos conquistando.
Las profecías cuentan la historia de nuestra conquista, pero acto seguido debemos regresar a Maguiltor para defender los asentamientos. Para que eso no ocurra, me he cubierto bien las espaldas, porque los ejércitos de Sir, Goor y Dick han sido burlados, y nuestra defensa no ha sido descuidada. La mayoría de hermandades permanecerán en la ciudadela, incluso el Imperio se quedará para rechazar cualquier ataque. Una vez compruebe que nadie desea atacar, o que el ataque ha sido rechazado, viajaremos hacia el Reino de Frangul para reforzar a los Xelth y continuar con el plan.
-Preparaos. -ordeno a Ser refiriéndome a su hermandad.