Son los hijos de señores o del rey, que viven en ciudades privilegiadas. En este grupo se encuentran tanto trabajadores, como estudiantes, como ayudantes de los señores y por supuesto los sirvientes que realizan las labores del Castillo Real.
Viven cómodamente, con todas sus necesidades cubiertas. Sólo deben de preocuparse de formarse como personas respetables y posteriormente cumplir con su labor encomendada.